domingo, 22 de enero de 2012
miércoles, 18 de enero de 2012
domingo, 15 de enero de 2012
Cadena de favores...
Quizás lo bonito sería no esperar nada a cambio. Pero las cosas con recompensas (no me refiero a lo material) lo cambian todo. Es como si te dijeran que siguieses así, que no pararas. Es una pequeña felicidad.
Tú me regalas, yo te (a quien sea) regalo, él/ella le regala, vosotros le regaláis.... así hasta completar una cadena tan infinita de favores que sería imposible ir hacia atrás, solo avanzar. Eso es lo que importa.
Ojalá todo funcionara así. Me temo que en mi propio mundo, incluso en mi vida, las cosas no funcionan ni mucho menos así, o por lo menos como yo lo veo.
Aunque quizás todo esto sea más complejo, que no sea "cualquiera" quién te dé esa recompensa, o que de alguna manera te devuelva el favor. No hace mucho leí un gran libro de Albert Espinosa que los nombra como "perlas" en otro libro como "los amarillos", aunque creo que más bien es el último concepto. Me gusta esta idea, puede ser que a ojos de mucho sea soñadora, imaginativa o yo que se qué. Pero me da igual.
No me gusta lo que veo, será que no estoy conforme. A veces me gustaría que todo fuese de otra forma.
Parar el mundo, eso estaria bien.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)
